lunes, 30 de noviembre de 2009



"Yo creo que desde muy pequeño mi desdicha y mi dicha al mismo tiempo fue el no
aceptar las cosas como dadas. A mí no me bastaba con que me dijeran que eso era
una mesa, o que la palabra "madre" era la palabra "madre" y ahí se acaba todo.
Al contrario, en el objeto mesa y en la palabra madre empezaba para mi un itinerario
misterioso que a veces llegaba a franquear y en el que a veces me estrellaba." "En suma, desde mi relación con las palabras, con la escritura, no se diferencia
de mi relación con el mundo en general. Yo parezco haber nacido para no aceptar las co-
sas tal como me son dadas."


JULIO CORTAZAR